Una vez que se reveló la compra de WhatsApp por parte de Facebook, causó gran sorpresa en todo el mundo. Incluso se dice que fue una de las mayores transacciones del sector tecnológico.
Sin embargo, existe un curioso precedente sobre el pasado de Brian Acton, quien junto a Jan Koum, crearon el servicio de mensajería. Antes del lanzamiento de WhatsApp, el exjefe de Yahoo! El equipo de ingeniería de la plataforma decidió postularse a un proceso de selección para trabajar en Facebook.
Sin embargo, Acton no quedó. Quién sabe si ese regreso del destino le jugó buena o mala pasada, ya que a los pocos años su app revolucionó el mundo de la mensajería.
Volviendo al tema de aquel proceso de selección, al parecer el exrepresentante de Yahoo! No encajaba en el perfil buscado por los responsables de la empresa de Mark Zuckerberg.
Ese fracaso laboral no fue el único que cosechó el especialista en esos años. Tiempo antes de ese contratiempo, intentó entrar a Google y no pudo. Dos negativas laborales que probablemente tuvieron mucho que ver con el nacimiento de WhatsApp, la aplicación que al cabo de unos años le permitió entrar en Facebook por la puerta grande.
Un día Facebook compró WhatsApp
El 20 de febrero de 2014, Facebook anunció la compra de WhatsApp. Como no podía ser de otra manera, Mark Zuckerberg estuvo al frente de las negociaciones. La operación se realizó por 19.000 millones de dólares, una suma cercana a los 3.000 millones de euros.
Pero además, por si esto fuera poco, incluyó acciones de la empresa Facebook por 12.000 millones de dólares.
La venta adquirió tal importancia que Koum se unió a la junta directiva de Facebook. Además de los fundadores de WhatsApp, los empleados del servicio de mensajería percibieron otros 3.000 millones de dólares.
Actualmente es una empresa con 55 empleados, la mayoría ingenieros, que gestionan la app con más de 450 millones de usuarios al mes.
Nacimiento de WhatsApp
La plataforma surgió en 2009, cuando el ucraniano Jan Koum y el estadounidense Brian Acton, decidieron poner en marcha un servicio de mensajería al que la gente se adapte, con el que pueda ahorrar y que le resulte fácil.
De ahí nació WhatsApp, un software gratuito para smartphones durante el primer año, y luego con un coste de 0,99 dólares al año.
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